Hacía tiempo que no me despertaba con una vista tan bonita.
(El pueblo es uno de los lugares más bonitos y agradables que conozco, y hacía mucho tiempo que no me despertaba con unas vistas tan bonitas. Marie-Claire y Damien fueron los mejores anfitriones que se puedan desear. Personas increíblemente amables a las que les encanta ayudar a los demás e hicieron que este viaje fuera realmente memorable. ¡Muchas gracias por todo!
El pueblo más bonito y un lugar perfecto para alojarse
El pueblo más bonito y un lugar perfecto para alojarse. Los anfitriones son encantadores y el apartamento estaba limpio, acogedor, bien equipado y cómodo. Increíbles vistas desde el precioso jardín. En resumen, perfecto.
Buen lugar para tomar lo esencial
¿Qué se puede decir de Cabrerets? Que lo atraviesa un río, fresco, vivo, nutritivo, corazón palpitante del valle. Que los acantilados vigilan, refugio de aves, atrapando los últimos rayos del atardecer y la bruma matinal. Los acantilados donde la gente siempre se ha reunido y refugiado. Las campanas siguen sonando por la mañana para celebrar la vida, como siempre lo han hecho. Qué poco ruido hace el mundo. Que el bosque es denso alrededor y los viñedos no tan lejos. Que hay innumerables paseos, que podrías quedarte mucho tiempo. Para volver a descansar. Cerrar los ojos, abrirlos, meditar, soñar. Detenerse. Tocar con la mirada las cimas de los acantilados, sumergir los pies en las frescas aguas. Para escuchar. Y luego hablar con la gente que está allí, dándote la bienvenida. Descubrir la expresión de los artistas por doquier. Es un gran lugar para entrar en contacto con lo esencial. Larga vida a la casa rural y felices encuentros a Marie-Claire y Damien que eligieron Cabrerets.
La naturaleza nos cuida para que pasemos unas buenas vacaciones.
Un lugar encantador para vivir. La naturaleza cuida muy bien de nosotros para que pasemos unas vacaciones estupendas. Gracias Marie-Claire y Damien por la cálida bienvenida. Todo lo mejor para el futuro de esta encantadora casa rural.